La migración de cigüeñas en La Rioja se ha convertido en un fenómeno natural de gran relevancia y atractivo turístico. Uno de los puntos que contribuye a esta migración es la proximidad de la Reserva Natural de los Sotos del Ebro, un espacio que ofrece un hábitat adecuado para estas aves durante su viaje.

Pero esto no es todo, ya que la arquitectura barroca de la Colegiata de San Miguel y la actitud tolerante de los habitantes de Alfaro hacen de esta región un lugar incomparable para las cigüeñas. En particular, la Colegiata de San Miguel alberga la mayor colonia del mundo de cigüeña blanca en un solo edificio, con alrededor de un centenar de nidos.

La Rioja como destino turístico en época de migración de cigüeñas

Los nidos de cigüeñas en la Colegiata de San Miguel son un testimonio claro de la habilidad y dedicación de estas aves. Algunos de estos nidos, los más antiguos, pueden llegar a pesar hasta media tonelada y están compuestos por diversos materiales como ramas, restos vegetales, telas, cuerdas, papel y barro.

Tras la llegada de machos y hembras que se dedican a la construcción de los nidos, llega el emocionante momento del nacimiento de los cigoñinos. La Colegiata de San Miguel, declarada Monumento Nacional, se convierte en el hogar de entre 600 y 700 nuevos ejemplares durante esta temporada. Este templo barroco de ladrillo se convierte en el inicio de vida y actividad de muchos cigoñinos.

Durante la primavera, el cielo de Alfaro resuena con un distintivo sonido conocido como crotoreo, que proviene de la colonia de cigüeña blanca que llega desde África. Este sonido, similar al castañeteo de unas castañuelas, es un aspecto único de la especie y contribuye al carácter distintivo de la migración de cigüeñas en La Rioja.

Cambios en el comportamiento migratorio de las cigüeñas

La migración de las cigüeñas es un fenómeno que ha sido objeto de estudio y seguimiento en los últimos años. Aunque muchas cigüeñas realizan el tradicional viaje a África para pasar el invierno, se ha observado que algunas prefieren permanecer en España; gran parte de ellas en La Rioja.

Los estudios también han revelado que el comportamiento migratorio de las cigüeñas está influenciado por la edad del ave. Los adultos tienden a quedarse en España durante el invierno, aprovechando los recursos locales para su supervivencia. Por otro lado, la mayoría de los jóvenes atraviesan el Estrecho de Gibraltar en dirección al continente africano, siguiendo un patrón migratorio más tradicional.

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